¿Te imaginas que cada año mueren más de 2 millones de personas por culpa de su trabajo? Esto es lo que ocurre en el mundo por las enfermedades profesionales, que son aquellas que se originan por el desempeño de una actividad laboral y que pueden dañar la salud física, mental y emocional de los trabajadores. Además, se estima que hay 270 millones de accidentes de trabajo en todo el mundo cada año.

Para iniciar nuestro blog sobre patologías ocupacionales, es necesario que comprendamos bien las distinciones entre los términos que ya hemos mencionado, incidente en el trabajo y por otro lado afección relacionada con la actividad profesional.

Según la Ley de Riesgos de Trabajo N.º 25.557 y sus modificatorias, los accidentes de trabajo son aquellos sucesos imprevistos y violentos que ocurren durante el trabajo o en el camino entre el trabajo y el hogar. Por otro lado, las enfermedades profesionales son aquellas que se originan por el desempeño de una actividad laboral o por la exposición a agentes químicos o físicos en el lugar de trabajo.

Tras haber aclarado las distinciones entre esos dos términos En este blog, te voy a enseñar todo lo que tienes que saber sobre los problemas de salud laboral: su naturaleza, su diagnóstico, los derechos de los trabajadores, las formas de evitarlos y los pasos para reclamarlos.

EN 2023 ¿CÚALES SON LAS ENFERMEDADES PROFESIONALES MÁS COMUNES?

¿Qué enfermedades profesionales son las más frecuentes en el listado del año 2023?

Enfermedades de la piel

Son causadas por diversos factores, entre los que se incluyen actividades al aire libre de forma permanente y prolongada. Las padecen los trabajadores que se emplean en construcción, limpieza de ventanas, actividades agrícolas, mensajeros y repartidores, etc. Enfermedades ocupacionales en la piel Estas personas pueden tener mayores probabilidades de desarrollar cáncer de piel y otras enfermedades. La causa es la exposición a substancias químicas peligrosas de forma permanente.

Las enfermedades más comunes de la piel que pueden padecer los trabajadores incluyen:

  • Cáncer de piel. Es causado por un crecimiento anómalo de células escamosas.
  • Erupciones. Es un sarpullido en la piel irritada o inflamada que pica y duele.
  • Eczema. Es una inflamación en la piel conocida como dermatitis.
  • Infecciones diversas de la piel. Tales como impétigo, abscesos cutáneos, síndrome de la piel escaldada estafilocócica, forúnculos, ántrax, celulitis y otras.
  • Inflamaciones. Urticaria o ronchas causadas por la liberación de histamina en el sistema inmunológico.
  • Dermatitis de contacto. Es causada cuando la piel entra en contacto con productos químicos presentes en el látex, jabones, detergentes, tintes, etc.
  • Úlceras. Son pequeñas llagas que se forman en cualquier parte del cuerpo. Las más comunes son las úlceras pépticas (estómago / duodeno).»

Enfermedades Respiratorias

Los trabajadores que se enfrentan a sustancias químicas dañinas y peligrosas cada día, tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades respiratorias. Los gases tóxicos que se respiran de forma continua, generan irritación y heridas en el pulmón y las vías respiratorias.

Entre las enfermedades respiratorias más comunes que están cubiertas por la compensación de los trabajadores están:

  • Asma ocupacional. Inflamación de los bronquios que conlleva a los ataques de sibilancias y dificultad para respirar, tos y sensación de opresión en el pecho.
  • Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC). La bronquitis y el enfisema suelen ser las afecciones más comunes causadas por esta enfermedad. Causa daños irreversibles.
  • Tuberculosis. Infección bacteriana que causa el germen conocido como Mycobacterium tuberculosis.
  • Mesotelioma. Es una forma de cáncer muy raro que se genera a partir de las células transformadas que se originan en el mesotelio.
  • Silicosis. Enfermedad crónica producida por aspirar gran cantidad de polvo de sílice.
  • Neumonitis. Es una inflamación pulmonar que está limitada al intersticio (neumonía viral, neumonía por irradiación, incluida la fibrótica).
  • Faringitis. Sus síntomas son dolor o irritación en la garganta al tragar. Se presenta junto con otras infecciones (resfriado / gripe).» es:

Pérdida De La Audición

La exposición constante y prolongada a ruidos o sonidos muy fuertes producidos por maquinarias y equipos de trabajo en ambientes laborales como fábricas, aeropuertos, discotecas y otros, puede provocar la pérdida de la audición. No es suficiente con usar equipos de protección personal como auriculares, cascos y tapones para prevenir estos daños. La capacidad auditiva del trabajador se reduce gradualmente cuando está expuesto a ruidos o sonidos con decibeles muy elevados.

Lamentablemente, los trabajadores que padecen de lesiones y enfermedades auditivas severas, a veces no reciben beneficios de compensación adecuados. Esto impide el tratamiento correcto de dichas lesiones.

Esfuerzo Excesivo

Dentro de estas enfermedades se agrupan los trastornos músculo-esqueléticos. Estas enfermedades y lesiones, figuran entre las primeras en cuanto a reclamaciones de compensación de los trabajadores.

Los trabajadores más propensos a sufrirlas son: obreros de la construcción, empleados de la salud (camilleros, paramédicos), trabajadores de fábricas y almacenes, entre otros.» . Son más habituales en ciertas ocupaciones que requieren más esfuerzo. Por ejemplo, cargar pesos y estirar o arrastrar objetos a diario.

¿CÚALES SON LAS CAUSAS DE LAS ENFERMEDADES PROFESIONALES?

Los factores de riesgo asociados al desarrollo de enfermedades en el trabajo son: 

Exposición a Agentes Químicos

Estos elementos se encuentran en el aire en distintas formas: gas, polvo, humo, vapor, etc. La vía parenteral (inyecciones) o inhalación de estos agentes químicos puede generar desde irritación hasta cáncer.

Exposición a Agentes Físicos

La exposición a los agentes físicos en sus diversas formas: ruido, vibraciones, radiaciones, es otra causa de enfermedades laborales.

  • Ruido excesivo. Produce daños auditivos como sordera y no auditivos como presión arterial, alteración nerviosa, irritación, inquietud, etc.
  • Vibraciones: causan distintos efectos, desde los mareos o vómitos hasta alteraciones en la columna. Además de alteraciones en la sensibilidad de las manos, dolores en la zona lumbar y alteraciones digestivas.
  • Radiaciones*. Dichas radiaciones son de dos tipos: las ionizantes y las no ionizantes.
  • Radiaciones ionizantes. Pueden llegar a alterar las células al originar partículas cargadas de electricidad (iones) y originar tumores y cáncer.
  • Radiaciones no ionizantes. Son más frecuentes en el trabajo. Tienen una carga de energía menor y son menos peligrosas, aunque pueden causar alteraciones de la piel. Por ejemplo, irritación, enrojecimiento, quemaduras y daños menores en los ojos (conjuntivitis).

Exposición a Temperaturas Extremas

La exposición permanente al calor o frío extremos, ocasionan lesiones y daños al organismo humano e incluso la muerte. Hay una serie de patologías asociadas con estos factores como: pérdida de destreza con las manos y enfermedades como la hipotermia.

Exposición a Agentes Biológicos

Por agentes biológicos se denomina a los virus, bacterias, hongos y otros seres vivos. Estos contaminantes causantes de enfermedades graves están agrupados así:

  • Virus. Viven y se reproducen dentro del organismo humano o animal y se contagian por contacto físico, saliva o el aire en el trabajo.
  • Bacterias. Son organismos más complejos que los virus y de mayor tamaño y causan enfermedades como tuberculosis o tétanos.
  • Protozoos. Organismos microscópicos que pueden vivir dentro de un humano y causar enfermedades como la toxoplasmosis.
  • Hongos. Organismos de origen vegetal y tamaño microscópicos que afectan la piel y las mucosas.
  • Parásitos. Son animales de distinto tamaño que penetran en el organismo y lo infectan causando daños en el intestino, los pulmones, etc.

LA PREVENCIÓN COMO HERRAMIENTA DE GESTIÓN

La prevención de las enfermedades profesionales es un aspecto fundamental para proteger la salud y el bienestar de los trabajadores. Según los resultados de la búsqueda web, existen algunas medidas generales y específicas que se pueden adoptar para prevenir y controlar las enfermedades profesionales, tales como:

  • Informar y formar a los trabajadores sobre los riesgos asociados a su puesto de trabajo y las medidas de protección adecuadas12.
  • Implantar estructuras organizativas que permitan responder eficazmente a las necesidades y retos del trabajo, evitando el estrés, la sobrecarga o el burn-out1.
  • Dotar a los trabajadores de los equipos de protección individual (EPI) necesarios para evitar o minimizar la exposición a agentes nocivos31.
  • Realizar una adecuada gestión preventiva en la empresa, identificando los riesgos y condiciones desfavorables del trabajo, y realizando reconocimientos médicos periódicos2.
  • Especial cuidado en el manipulado de muestras biológicas, objetos cortantes o punzantes, gases anestésicos, citotóxicos o desinfectantes, entre otros

¿CÚAL ES EL PROCEDIMIENTO QUE DEBES SEGUIR?

Si crees que tienes una enfermedad profesional, lo primero que debes hacer es acudir al médico de cabecera o a un especialista para que te diagnostique la enfermedad y te dé el parte de baja si tu estado de salud te impide realizar el trabajo1. El médico también debe enviar un informe de sospecha de posible enfermedad de trabajo a la Inspección Médica2.

Después, debes iniciar el trámite ante la mutua de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales de tu empresa, presentando el parte de baja y el informe médico. La mutua es la encargada de reconocer o denegar la enfermedad profesional, y de proporcionarte la asistencia sanitaria y las prestaciones económicas que te correspondan1.

Si la mutua no reconoce tu enfermedad como profesional, puedes reclamar ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), que resolverá en última instancia. También puedes acudir a los tribunales si no estás conforme con la resolución del INSS1.

Es importante que actúes cuanto antes si crees que tienes una enfermedad profesional, ya que los plazos para reclamar son limitados. Además, contar con el asesoramiento de un abogado especialista en incapacidades laborales puede ayudarte a defender tus derechos y obtener una indemnización justa